¿Cuál es el hilo que nos une a Malintzin, una mujer nativa que ha sido despreciada por la historia oficial? Las historias de nuestros pueblos, y de las mujeres indígenas en especial, han sido también tergiversadas, cambiadas, mutiladas o silenciadas para acomodarlas a la narrativa. nacionalista dominante. Pero otras versiones de nuestra historia, como la de Malintzin, laten en otros medios que también comunican. Malintzin, la nuestra, vive en las danzas de los pueblos que la representan desde el respeto y la admiración, ella vive en la tradición oral que en muchas lenguas distintas nos la muestran desde la lente de la complejidad y que contradicen la lectura de Malintzin como traidora.
La tradición textil que vistió a Malintzin pervive hasta la actualidad; la historiadora Camilla Townsend nos cuenta cómo, a pesar de la llegada de otras tradiciones textiles, Malintzin continuó vistiendo huipiles durante toda su vida. Nosotras hemos heredado y mantenemos viva la tradición textil del huipil en nuestros pueblos a pesar de que, en muchas ocasiones, el racismo y el desprecio han intentado desaparecerla. Texto y textil comparten origen etimológico y es a través de los huipiles que aquí hemos creado que establecemos un diálogo simbólico con la figura de Malintzin. Así como ella hablaba diversos idiomas, nosotras, desde una diversidad de lenguas y culturas establecemos esta línea de encuentro en el huipil; en varios casos, hemos tomado del pasado de nuestras propias tradiciones textiles elementos y técnicas que traemos al presente para reavivarlos.
Para la creación de estos huipiles contemporáneos, nos reunimos hace varios meses para conocer los detalles de la vida de Malintzin, los complicados retos que enfrentó y el importante papel que jugó para los pueblos mesoamericanos de su época que la plasmaron en sus propios documentos históricos como el Lienzo de Tlaxcala; conocimos también fragmentos de huipiles antiguos elaborados en épocas cercanas al tiempo en el que vivió Malintzin, analizamos la técnica, los motivos plasmados y los materiales utilizados. Con toda esta información e intercambio de ideas y saberes, creamos estos huipiles que reflejan recreaciones contemporáneas en diálogo con la tradición y el pasado.
Cada sistema cultural determina lo que considera elegante y bello. Los huipiles contemporáneos para Malintzin de esta exposición son una muestra de elegancia desde los pueblos amuzgo, ikoots, mazateco, mixe, triqui, tsotsil y zapoteco, huipiles que habría vestido una mujer tan importante como Malintzin en el Siglo XXI. La elegancia en estos huipiles está asociada también al cuidado de la elaboración y al tiempo que tomó confeccionarlos, esta lentitud no obedece a las lógicas del mercado que demanda una producción cada vez más rápida y que inhibe así la creación de huipiles verdaderamente elegantes según nuestros propios códigos culturales.
Cada huipil es también el resultado de un trabajo colaborativo entre dos o más creadoras textiles y, como una segunda piel, hemos impregnado en cada uno la historia de nuestros pueblos, elementos fundamentales de nuestras cosmovisiones, referencias a nuestros entornos geográficos, nuestros cerros, siembras, fiestas, animales y símbolos sagrados; de algún modo cada huipil es una especie de códice en el que los hilos narran nuestro pasado en el presente de la innovación textil. Estos huipiles representan nuestro deseo de que las historias y los símbolos culturales de nuestras comunidades no se pierdan como se borró la historia de la verdadera Malintzin.
Con afecto y respeto hemos preparado estos textos de fibras naturales en donde pueden leerse nuestras propias versiones de lo que son nuestras comunidades. Estos huipiles son de nuestros pueblos y esperamos que a Malintzin le gusten, que los use, que se los ponga, como una manera simbólica de restituirle la importancia de la que la historia oficial la ha despojado.
¿Qué huipil habría vestido Malintzin en la actualidad? Estas son nuestras respuestas. El hilo hablará por nosotras.