La urdimbre y trama son de algodón hilado y tejido a mano en ligamento sencillo. La alta torsión de los hilos crea un efecto crepé. La prenda cuenta con algunos refuerzos de tela de algodón sin teñir cosidos en el interior. Los diseños en añil se obtuvieron mediante dos técnicas: ori nui shibori (pespuntes, como en el caso anterior) y yanagi shibori. En esta segunda técnica, la tela se plisa en forma de acordeón en sentido vertical. El efecto que se observa puede interpretarse como las ramas de un sauce llorón.
La palabra “kimono” aparece escrita por primera vez en el periodo Kamakura (1185-1333). Cuando los portugueses llegaron a Japón en 1543, anotaron que “qimono” o “qirumono” significaba “ropa” y que había varias versiones: para el verano - katabira, para el otoño - awase y para el invierno. Cuando a este último se le añadía un forro, generalmente se le llamaba kimono. La prenda que le antecedió se conocía con el nombre de kosode y desde el siglo XVI se utilizó por toda la población, ya sea como prenda interior o exterior. Es importante mencionar que estas prendas se portan con la solapa izquierda sobre la derecha; lo contrario se emplea para vestir el cuerpo de una persona que ha fallecido.